jueves, 5 de junio de 2014

El pasado desagradable, olvídalo

Es una virtud muy útil poder olvidar las cosas desagradables que hemos hecho en la vida. Al fin y al cabo, han pasado tantas cosas “debajo del puente” que no debe seguir sufriendo y castigándose por cosas que ya tengan un año o una década.
La persona “astuta” no se deja molestar por “cositas”; “domina” su conciencia y se deshace de sus pecados en la forma más inteligente: los olvida. “Esconde” las barreduras debajo de la alfombra, “quema” los documentos, “entierra” las pruebas, “cubre” las manchas de blancura y si es necesario, “elimina” al testigo. Entonces puede “vivir en paz”. Como suele decirse, “el hombre más feliz es el de peor memoria”.
Pero lamentablemente todo aquello es teoría. En la vida real no es tan fácil como parece. La verdad es que jamás se olvida realmente. Por supuesto que podemos ocuparnos de otras cosas más urgentes y divertirnos en formas cada vez más enérgicas. Entonces el sentido de culpa se escabulle hacia la oscuridad. Sin embargo, mientras cubrimos una sola injusticia sin rectificar, ésta queda en la memoria.
Es posible que ningún otro lo sepa, pero nosotros sabemos qué es lo que está “debajo de la alfombra”, sabemos que una parte de nuestros bienes no son realmente nuestros, y en el fondo reconocemos que no merecemos el honor y la posición social que actualmente disfrutamos.

El olvido de los pecados pasados es muy engañoso. Puede guardarse un secreto durante años, para luego despertarse de golpe y molestarnos en las formas menos esperadas.Nos quita el sueño, nos produce pesadillas, nerviosismo, temores, enfermedades y mil problemas más. Lo que está bien enterrado trata de resucitar, o alguien tropieza casualmente con “la alfombra”.
Lo peor en la persona que sufre por los ecos del pasado es que generalmente los quiere seguir cubriendo, porque tiene miedo de que la alcance y la destruya. A veces se encuentra en la necesidad de hacer algo peor para evitar el desenmascara-miento. Pero todo este esfuerzo es inútil, porque tarde o temprano la verdad viene a la luz.
Muchos creen que las enseñanzas de Jesús tienen que ver sólo con la religión y el cielo, pero dijo algunas cosas muy prácticas acerca de la vida actual, cosas que la misma conciencia nos enseña. Por ejemplo, dijo, “nada de lo que está escondido se quedará sin descubrir; y no hay ningún secreto que no llegue a saberse”. Habla de ese día, ahora o después, en que la memoria volverá a reactivar todo su contenido, y en que no tendremos dónde escondernos.
El sufrimiento producido por el temor y el terror es completamente innecesario, porque Jesús al mismo tiempo ha creado una salida. No podemos invertir los hechos, ni mucho menos anular las consecuencias, pero sí es posible conseguir el perdón y la tranquilidad de espíritu..

Lo único que tenemos que hacer nosotros es arrepentirnos y aceptar ese perdón que Jesús te ofrece a través de su sacrificio en la Cruz. Y eso significa dejar de huir y esconder nuestros hechos. Por supuesto que incluye devolver todo lo robado y rectificar las ofensas en todo lo posible, pero esto es relativamente fácil y hasta es un placer, una vez que hemos experimentado el alivio y La paz del ser perdonado.
Así es que hay dos maneras de deshacernos de lo desagradable del pasado: tratar de olvidarlo, o aceptar el perdón. La diferencia es importantísima porque el olvido humano y el esfuerzo para esconderlo simplemente no dan resultado. El perdón divino, en cambio,significa que la suciedad es eliminada para siempre y que uno tiene paz con Dios y consigo mismo.

autor Rubén Kassabián

frase motivadora

Las palabras que no van seguidas de hechos, no valen nada.

En situaciones difíciles solo ora y actua



¿Por qué nos cuesta tanto orar cuando notamos que algo anda mal?   Quizás creemos que somos capaces para resolver nuestras situaciones por nuestro propio medio así que Dios mejor queda para otro momento, para el momento que ya no podamos mas. 
Es bueno que tenga presente que le importas mas a Dios de lo que imaginas, en todas las áreas de tu vida y mas aun probablemente en aquellas que para ti son insignificantes. 

Nota que tantas veces que intentas resolver todo por tu cuenta, sin su ayuda, es un fracaso y así solo logras empeorar y empeorar. Es bueno que lo intentes lo que no es bueno es creer que puedes hacer lo que a Dios le corresponde hacer, o sea haz tu lo que humanamente es posible pero lo imposible ponlo en manos de Dios, pues con el al frente siempre todo ira bien.

A la ves ten pendiente que debes orar, pero cuando ores no dejes que Dios haga todo y tu te quedas sentado, NO, ora pero a la ves actúa, a El le gusta ver tu disposición.
La oración es el medio para hablar con Dios, pedir, agradecer, comunicarte en todas las circunstancias sean buenas o sean malas. A esa oración une tu fe, porque sin fe no veras los resultados.

Cuentales todo lo que te atormenta, preocupaciones, debilidades, que se han convertido en un insoportable peso sobre tus hombros, impidiéndote vivir la vida a plenitud,   pero  también cuentale tus momentos hermosos. Sientete seguro de que el te escucha con atención y por tanto aunque se tome un tiempo te dará la solución correcta.  Al final veras su gloria y su poder


autora raquel demorizi